Contratar un seguro médico estando embarazada es una situación a la que se enfrentan muchas mujeres, pero que tiene cierta dificultad. Esta reside principalmente en la carencia de los mismos.
¿Qué es un seguro sin carencia? Aquel cuya póliza se empieza a hacer efectiva desde el momento en el que se contrata. Esto no suele ser así en los casos de embarazo, donde este proceso suele durar entre 6 y 10 meses.
Respecto al seguro médico embarazo sin carencia, esta aplica incluso si ya estabas embarazada al firmarlo, aunque aún no lo supieses. Por lo tanto, para contratar seguro médico estando embarazada lo ideal es que lo hagas antes del embarazo. Es decir, si estás planificando tener un bebé, haz el seguro antes de quedarte embarazada (contando con ese margen de aproximadamente 8 meses).
¿Se puede hacer un seguro privado estando embarazada?
Por supuesto. De hecho, las compañías no podrían rechazar hacerlo aunque solicites la cobertura estando embarazada. El problema reside en el período de carencia.
Seguros para embarazadas: por qué hacerlo
Contratar un seguro médico cuando se está embarazada permite a los mujeres tener más control sobre el proceso de gestación y hacer un seguimiento exhaustivo del mismo. Pero también sobre tu propia salud y el tratamiento del dolor de espalda tan común en esta época. Generalmente, las compañías cuentan con coberturas para la asistencia al embarazo. Sin embargo, estas no suelen aplicar si llevas pocos meses en las mismas.
Aún así, algunas te ofrecen la posibilidad de suprimir el periodo de carencia previo pago de una suma económica. Algo similar a lo que sería el copago en otras modalidades de seguros.
Las coberturas que suelen tener la mayoría de los seguros de salud en embarazos son: visitas periódicas al ginecólogo con el objetivo de controlar todo el proceso y el salud de ambos miembros, pruebas diagnósticas para conocer el estado de desarrollo del feto a través de ecografías, pruebas de glucosa y amniocentesis, entre otras, y asistencia en el parto con hospitalización y anestesia en caso de que fuera necesario.
Elegir el mejor seguro médico embarazo
La mayoría de los seguros para embarazadas cubren prácticamente lo mismo. Por lo tanto, un factor esencial para que puedas decidir reside en la atención que recibas. Busca aquel donde los profesionales de la compañía y los sanitarios te hagan sentir cómoda y atendida. El embarazo no es una época para estar triste o deprimida.
Los elementos esenciales a los que debes prestar especial atención son conocer con exactitud qué coberturas te ofrece y, sobre todo, si cuenta con el ya mencionado periodo de carencia y cuánto dura el mismo.
Como has visto, contratar un seguro médico de embarazo es algo realmente recomendable. Lo ideal es que si estás pensando en tener un bebé, organices una póliza acorde con varios meses de antelación. En cuanto a su contratación, lo más importante es que conozcas la letra pequeña y que te sientas cómoda con tu elección.