Los reyes de las cenas navideñas, los Percebes.

Todavía falta unos meses, pero hombre y mujer precavidos valen por dos. Así que si te estás planteando hacer este año la cena de navidad o por el contrario te toca ir a casa de tus padres/suegros si de verdad quieres triunfar lo que debes hacer es acudir al rey gallego de las cenas, el percebe.

Puede que su aspecto te intimide, sobre todo si nunca has tenido el gusto de probarlos, pero te aseguro que no se han convertido uno de los manjares gallegos más apreciados por los paladares más selectos por nada. Así que para que te vayas familiarizando con este plato típico te vamos a dar unos consejos para que cuando aparezcas con ellos en la cena de Navidad quedes como un auténtico experto de la gastronomía.

Lo primero que debes saber antes de ponerte a comerlos en Navidad es que estos crustáceos tienden a crecer sobre aquellas rocas que son batidas por las olas. Lo cierto es que gastronómicamente hablando, nos encontramos ante un alimento delicioso y muy valorado en países como España, Francia, Japón o Portugal. Su precio suele ser algo elevado pero tienes que pensar que es un producto donde prima la calidad, principalmente esto se debe a su difícil captura, ya que mediante útiles de mano y de forma totalmente artesanal, los percebes son capturados cuando la marea baja y quedan al descubierto sobre las rocas, en muchos casos sobre lugares de difícil acceso.

 

¿Cómo se comen los percebes? La mejor manera es cociéndolos

 

percebes-2

Ahora que ya sabes a lo que te enfrentas, te vamos a dar el truco final para que no quedes en ridículo en la cena de Nochebuena o de Navidad te voy a enseñar cómo se deben comer los percebes. El percebe tiene dos partes, la uña (QUE NO SE COME) y el tronco, que es la parte comestible del percebe, este pedúnculo es la parte carnosa de este crustáceo, caracterizándose por ser un cilindro de color anaranjado. Para que puedas disfrutar de la rica carne del percebe tienes que arrancar sin miedo a mancharte el tronco de la uña, quedando así al descubierto la carne cuyo sabor recuerda mucho a mar.

Si después de esto te animas a probar este plato delicatessen de las costas gallegas, te recomendamos que apuestes por el percebe gallego, ya que el de sol o el marroquí no saben igual debido a que han vivido en zonas con poco oxígeno en las aguas y también que lo compres fresco y recién sacado de lonjas gallegas como la de Coruña o Vigo, ya que el percebe congelado pierde todo su sabor y sus propiedades. Existen una gran cantidad de lugares donde poder pedir este producto y conseguir tenerlo fresco en la puerta de tu casa vivas donde vivas.

¿Te has animado? ¡Cuéntame qué tal la experiencia! Y como dicen en Galicia, Bo Probeito.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *